martes, 4 de enero de 2011

mi peor oso

La verdad me encantan los "osos"... "que oso!" es una de mis expresiones favoritas, la uso todo el tiempo y se me hace bastante cagada. Si me sigues en twitter te habrás dado cuenta que con frecuencia utilizo el hashtag #queoso y si me conoces bien en persona, probablemente también te habrás dado cuenta que utilizo la frase cuando estoy de humor simple. Pero esta historia es de un verdadero oso! ahora me doy cuenta de la belleza de la misma, pero en ese momento quería morir. Ahí les va:

Hace un par de años estaba a punto de abordar un vuelo del DF a Guadalajara (con mi jefe en turno) y mientras esperaba en la sala me percaté de un grupo de personas (todos hombres) vestidos igual: traje negro con rayas, camisa roja y corbata rayada color negro y rojo. Me percaté, pero cero le di importancia.

Después llegó el momento de abordar, y lo hicimos en cuanto nos fue posible (raro en mí, pero mi jefe así lo quiso). Me tocó sentarme lejos de mi jefe en una de las primeras filas, en medio, y casualmente uno de aquellos hombres de traje negro y camisa roja, se sentó junto a mí, del lado del pasillo. Después fueron pasando sus compañeros, y veía que todos le decían "eh! boludo!" con acento argentino, en un plan muy amistoso y feliz, por lo que el amigable de yo decidí preguntarle: "Vienen de Argentina?" (yo refiriéndome si todos ellos eran originarios de Argentina), a lo que respondió: "Sí... bla bla (cosas con un acento Argentino muy marcado)". Entre ese "bla bla bla" llegué a identificar la palabra "fútbol" y la palabra "Chivas". Puesto que estábamos en camino a Guadalajara, yo solito llegué a la conclusión de que eran un equipo argentino que iban a Guadalajara a jugar contra las Chivas.

Paréntesis: AMO el mundial, pero ODIO el fútbol fuera del mundial.. o más que odiarlo, me da exactamente idéntico.

Pero bueno... por intentar caerle bien, sin ninguna cultura futbolera, sostuve la siguiente conversación:

Yo: Ah, pues mucha suerte! la verdad a mí me caen mal las Chivas, así que les deseo mucha suerte. (En realidad las Chivas en mi vida tienen el mismo nivel de relevancia que el pepino que se esta pudriendo hace tiempo en mi refri. Tal vez menos).

Argentino: Que?!

Yo: (volumen más fuerte) QUE MUCHA SUERTE! QUE ME CAEN BEIN MAL LAS CHIVAS ASÍ QUE LES DESEO MUCHA SUERTE!!

El argentino no respondió, por lo que pensé "Ah, pinche argentino mamón.. equis!"

Finalmente todos los pasajeros entraron al avión y se sentaron en sus lugares. Llegó el momento de que el capitán diera sus palabras: "Buenas noches, estaremos despegando en 20 minutos, el vuelo será de X tiempo. Estaremos llegando a Guadalajara a X hora, en donde el clima es bueno. Y finalmente, BIENVENIDO A BORDO EL EQUIPO DE LA CHIVAS".

Resulta, que el dude que estaba sentado al lado de mí era un Argentino que era uno de los directores del momento del equipo de las Chivas (fuckin' casualidad que fuera argentino), y lo que me había explicado es que ELLOS eran las Chivas y que venían de Argentina (no que fueran argentinos como yo había pensado) de jugar contra no sé que equipo de allá (evento muy importante para el fútbol mexicano), y ya iban de regreso a Guadalajara.

Así es. Por tratar de caer bien, le dije con la mayor claridad posible a uno de los directores de uno de los equipos más importantes del país, que me caían mal. Y lo peor es que no habíamos ni despegado; todavía nos faltaba todo el vuelo! Aunque mi iPod no tenía pila, me puse los audífonos y fingí estar dormido... absolutamente todo el vuelo completito. Al aterrizar etc, intenté volver a entablar conversación, como para disculparme. Por supuesto que no contestó nada, y yo no sabía ni donde meterme... Pero finalmente me fui, y me desaparecí lo más rápido que pude... Hoy es una historia que me encanta contar. Como había dicho antes, una belleza :D.

Anécdota completamente verídica de la vida real.

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